No he sigut bona persona

Pienso mucho cada día, es casi un hobby para mí transformar mi realidad en algo que me enseñe cualquier dato valioso para entender más de la vida, la que me ha tocado y las que me rodean.

Intento ser fiel a mis dogmas, que evolucionen y nutran de todo lo que puedo exprimir, intento ser mejor persona en cada situación que me pasa. Pero creo que nunca he sido buena.

Siempre veo las carencias, el cómo mejorar, la carrera hacía la excelencia es un pasillo alargado y hay tramos en los que no se sabe si se anda marcha atrás. No encuentro ningún motivo para creer que he sido buena, de hecho tengo más motivos para pensar que sin saberlo he metido la pata de más, no he sido ni soy mala por vicio o inteligencia, simplemente he sido egoísta en momentos donde debería haber mantenido la paciencia, impaciente cuando se me pedía cautela, horrorosamente dañina arrastrando a mi dolor a aquel que me había dañado, cogido por los brazos y tirado al abismo de todo lo malo que una persona puede demostrar. No me considero por defecto mala pero desde luego me avergüenzo de haberlo sido por tonta, me avergüenzo de haberme refugiado en el cobarde dolor.

Cómo remediar la estupidez entonces, el poco tacto en las palabras, las pesadas pataletas, los síes en guardia para conseguir mi objetivo pisando del rival la cabeza; cómo dejar de pensar en que hay rivales si cuando se alejan lloras en alojada tristeza, cómo ser clara y concisa no dejándote guiar por el dolor mal administrado y ese veneno que te hace quemarlo todo hasta las cenizas. Cómo dejar de lado a todo aquello que de verdad es malo, el orgullo miedoso y el miedo orgulloso que se camuflan en indiferencia ante la audiencia pero a mí misma no me puedo engañar, cómo dejar de llorar sin lágrimas, restar importancia a lo incierto si lo único que es cierto es el quedar de la espera y la esperanza de reanimar el hilo de mi neurona al cerebro, cómo desencadenar sólo una vida de aciertos dejando de ocupar el trono de hierro y sal que en mi boca posan argumentos, cómo dejar de ser un quiero y no puedo en frialdad.

El miedo es el veneno que más escupo y trago confundido con bondad, pero si no hay cambio no hay camino, el movimiento genera movimiento, poco de eso y menos de cierto tiene quedar quieta en estos y ningún momento.

No, no he sigut bona persona, però ho intente y por eso mismo que lo intento no hay remedio en mirar quizás con mejores ojos mi empeño por más que me equivoque, mirar con menores defectos al resto porque en realidad en un espejo de lo que de mi pienso, dejarme un poco a mí misma en paz y no hacerme jirones, quizás me equivoque pero a nadie en tercera persona trataría yo tan mal que le diera vergüenza aceptar que lo ha hecho mal.

No soc bona persona amb mi mateixa, però ho intente. Almenys això queda.