Qué raro llegar a los veintiséis
Aunque parezca una broma, una tontería, que raro ha sido darme cuenta hoy que estoy transitando el vigésimo sexto año de mi vida. Nunca pensé que llegaría. Es casi triste leer eso pero no le quita verdad, me han pasado tantas cosas por las que podía renunciar a la suscripción anual a la vida que aún me sorprendo de no estar en un sitio mejor. Pero ya este es mi sitio, ya es un mejor sitio. Puede que haya olvidado todo lo que ha pasado gracias a la memoria selectiva y el tiempo que cura trayendo perspectiva, que haya perdido el foco de toda tristeza o simplemente que ya no me interesa pero si me da por recordar me asombro de todos los demonios que he tenido que tirar hacía el infierno: a veces me he quemado con ellos, otras sinceramente, no me acuerdo. Lo que quiero decir con todo esto, la conclusión que quiero con todo este de palabras armamento formar es: todo va a pasar. Y se sobrevive. A veces sales más fuerte, otra veces sales más loca pero lo cierto es que salir, sales. A veces sa...