Remordimientos en un noviembre veloz
Últimamente busco el camino para redimirme del mal que he hecho que dicho así suena a crimen mientras a vosotres os puede parecer una exageración ¿pero acaso no es ser egoísta, perezosa, malcriada y victimista un crimen con cuerpo ajeno e incluso conmigo misma?
¿No es ser manipuladora e impaciente, deshonesta y agresiva lo peor que puedes mostrar de ti?
Llevo tiempo mostrándome así ante ciertas personas y aunque no es lo único que tengo tampoco me acomoda el hecho de hacer sentir mal al resto, enseñar estos prismas es casi patético si luego me arrepiento de haber sido así. Podría escudarme en que se lo merecían pero quién soy yo para quedarme y hacer herida en vez de poner tierra de por medio, no me puede gustar tanto una pelea, gastar en ello mi ingenio, inteligencia y buena educación en la acepción más familiar a la escuela, se convierte en todo caso en una perdida de razón y entendimiento las malas formas que regalo. Luego, repito, todo es tormento.
Impulsiva pero a qué precio, todo no puede hacerme tanto daño, exagera mi cabeza el impacto y aunque sé de dónde viene este modo de operar ¿de verdad quiero no parar y seguir por este camino andando? es de burros y ciegos con doble venda en los ojos quien no quiere mirar hacía otro lado y deja ahogarse en el enojo porque para algo sirve la palabra, el tiempo para buscar las adecuadas, me he dado cuenta en estos días que muchas veces buscando encuentras que precisamente (venga, todos juntos) no fue para tanto.
Y si fue para tanto y mucho más no vale la pena discutir sino pelear una postura pero no hacerlo mediante agravios, detenerse y que te controle el dolor es un desacierto tan marcado que bien marcará los ojos de quien unos minutos a hablar a reservado: si no eres capaz de soltar y controlar tu emoción tu parte del trabajo puede estar mal desencaminado.
Pero todo esto es muy personal y tenéis que comprender que no escribo por escribir sino para expresar. No sabréis nunca el motivo y si así creéis que si invito a comprobarlo (es broma, pero si lo sabéis decidme que lo mismo y todo no soy tan misteriosa).
Sólo estoy transitando un espacio en el que me doy cuenta de todo lo que he hecho mal y no paro de pensar en que desde el dolor nada se puede solucionar. Pero todo tiene que saltar por los aires o al menos eso me decía "eres una hoguera que prende su propia llama" y es verdad. Lo era. Y siento tanto haber quemado cosas que no debería haber dado pero cometo errores que posiblemente me perseguirán de por vida.
Desde la culpa no se arregla nada por eso decido mejorar y espero que todo aquel que me ha visto y he tratado mal vea que soy una persona capaz de convertir todo el duelo, dolor y manifiesto de su emoción en algo bueno. Que he aprendido a perdonar salvo a mí misma. Que lo intento.
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